Y ¡fíjate tú! que yo nunca las he utilizado para eso, cuando me voy a dormir me duermo como un lirón. Creo que tengo mucha suerte y las ovejas, en cuanto a mí respecta, también.
Yo tenia una 150 ovejas aproximadamente. Pero con el paso del tiempo se pusieron remolonas y ya no les gustaba saltar, un día se durmieron antes que yo. Pero fue aquella noche en que me vi a mí mismo saltando cercos para dormir al rebaño, que acordamos que cada uno por su lado a la hora de dormir. Desde entonces descansamos todos profundamente...
10 comentarios:
Eso me ocurre a mi. Las ovejas han dimitido de sus puestos de trabajo. Las duermo.
Un abrazo.
uf.. me parece que somos muchos los que no tenemos a las ovejitas cerca para que no ayuden.
¿quien duerme a quien?mmmm.Un saludo
Bueno dichoso tú... las mías están en huelga: reclaman menos horas de trabajo! :-(
Saludos!
Y ¡fíjate tú! que yo nunca las he utilizado para eso, cuando me voy a dormir me duermo como un lirón. Creo que tengo mucha suerte y las ovejas, en cuanto a mí respecta, también.
Un abrazo,
Inma
Las ovejas hacen un trabajo duro, pero con los ojos cerrados, nadie las ve. Saludos
Coincido con HYDRO.. y agrego.. ¿habrán contado seres humanos para conciliar el sueño?.
Un saludo.
¿Es de día o de noche?...
Yo tenia una 150 ovejas aproximadamente. Pero con el paso del tiempo se pusieron remolonas y ya no les gustaba saltar, un día se durmieron antes que yo. Pero fue aquella noche en que me vi a mí mismo saltando cercos para dormir al rebaño, que acordamos que cada uno por su lado a la hora de dormir. Desde entonces descansamos todos profundamente...
Un abrazo
Muy buen cuento. Te voy a enlazar.
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